Buenas Relaciones en el Trabajo

 

Como crear y mantener relaciones personales en el trabajo

 

En muchas ocasiones hemos hablado sobre las relaciones personales, ya sean sociales, deamistad, o románticas, en el lugar de trabajo. Hemos visto tales situaciones desde diversos puntos de vista: considerando que son incorrectas cuando se permite que influyan en nuestro rendimiento, considerándolas como efecto secundario inevitable de la interacción con nuestros pares y colegas, considerándolas inefectivas para el éxito laboral y profesional personal. Sin embargo, hay un punto de vista que aún no hemos abordado, que resulta sorpresivo en muchos ambientes, y que puede ser descrito en una frase un tanto controversial: las relaciones en el trabajo pueden aumentar el rendimiento.

Si bien las relaciones personales en el ambiente laboral son desacreditadas, y en efecto no son recomendadas por muchos jefes y empleadores (a veces hasta prohibidas por reglamento), no podemos negar que se trata de una interacción necesaria para todos los hombres y mujeres.


Las amistades que se forjan en las oficinas y puestos laborales son inherentes a nuestra condición de ser sociales, aunque el problema aparece cuando no las sabemos manejar. Por lo general, las envidias, las propias frustraciones y algunos otros factores negativos son mal conducidos, llevando a chismes, comentarios, malos tratos y, eventualmente problemas. Esto se magnifica cuando el tipo de relación establecida se describe como romántica: aparecen celos, separaciones, e incluso tratos fríos, indiferencia y otras tantas actitudes en lo referente a la conducta.

Pero, claro, todo esto cambia cuando las relaciones son bien llevadas y manejadas. Un ambiente amigable resulta más productivo. Un ambiente cómodo y ameno permite que todos desarrollen sus labores sin mayores dificultades, confiándose unos en otros. Además, claro, cuando el ambiente es de buenas relaciones, los miembros del pequeño subgrupo tienen ganas de estar allí, ergo: aumenta la puntualidad, el humor, y la productividad en el trabajo.

Y cuando entre las buenas relaciones, o quizás en un hecho aislado, aparece un romance bien planteado, esto no significa el nacimiento de un problema  Incluso hay estudios que comprueban que un romance de oficina puede elevar la productividad, en especial cuando se cuenta con el apoyo de los pares. Los asuntos de confianza, de apoyo y de ayuda aumentan cuando hay romance en el aire.


Así, siempre y cuando preservemos una conducta cordial y profesional, los romances de oficina pueden ser lo que aliente a los empleados y trabajadores a elevar su confianza, aumentar su energía, y mejorar sus niveles de rendimiento y productividad. ¿No es una gran noticia?